(Parece que finalmente se fundió la bombilla al final del tunel)
Hemos hecho tantas cosas…
Pero tantas y tan dispares…
Tan disparatadas unas como cabales otras.
Y tan crueles como altruistas.
Por supuesto que todas justificadas sí, por muchos o por pocos.
No es exceso de vanidad declararnos los mejores ¿Verdad?
¡Celebrad la victoria! porque somos la raza elegida.
Por eso hemos edificado confortables campos de trabajo en antesalas de cementerios.
Hemos creado infinitos canales de comunicaciones para incomunicarnos.
Hemos aprendido a volar sin alar y a mentir sin sonrojos.
Hemos modelado dioses y demonios.
Hemos inventado sinonimos para poder decir lo contrario.
Y esculpido rencores para que otros maten por nosotros.
Hemos soñado dormidos lo que no vivimos despiertos.
Hemos muerto pocas veces por nuestras ideas y no pocas por las de otros.
Hemos dejado huellas en cavernas, lágrimas en desiertos y promesas en pergaminos.
Si, hemos hecho todo eso y mucho más. Y ahora ya sabemos de donde creemos que venimos y sabemos a donde creemos que vamos.
Incluso sabemos quienes creemos que somos.
¡Qué grandes!
¡Qué larga andadura..!.
Por fin hemos resuelto el puzzle, hemos descifrado el Cosmos. Ha sido un duro viaje pero… Me pregunto cual fue su propósito.
¿Lo hubo en realidad?
¿Acaso no os resulta triste descubrir qué después de tanto esfuerzo, tras semejante logro después de una jornada tan larga, sus últimos minutos sean tan oscuros…?